jueves, 10 de noviembre de 2011

El choque avisado con la realidad

Venía el Sevilla avisando, desplegando unos primeros compases de buen fútbol y luego durmiéndose, dejando que el rival tome le dominio de sus encuentros. Ya le pasó ante el Racing y a punto estuvo de darle la noche, pero se ve que no se ha aprendido de los errores y en ésta se la llevó. El Granada, colista de la Liga BBVA, le endosó al conjunto de Nervión su primera derrota en liga tras ganarle en el Ramón Sánchez-Pizjuan (1-2). A pesar de que los locales salieron muy fuertes, marcando antes del primer minuto de partido, su fútbol y garra se fue diluyendo, como su acierto de cara a la meta rival, defendida por un gran Roberto, que fue el mejor de su equipo. Esto dio alas a los nazaríes, los cuales no se amilanaron ante unos de los dos únicos equipos que aún seguían invictos en la competición domestica y con ganas y desparpajo endosaron un golpe de realidad a sus anfitriones.

Marcelino volvió a alinear a los once hombres que firmaron el empate en Nervión la semana pasada contra el Racing. Javi Varas en portería, Cáceres, Spahic, Escudé y Fernando Navarro en la zaga; Jesús Navas, Medel, Rakitic y un Trochowski algo más escorado hacia la banda izquierda para la media y Kanoute y Del Moral en la delantera. El once tipo que viene repitiendo el preparador cántabro a expensas de la recuperación de Negredo, su hombre-gol y a quién sustituye un Rakitic que no recupera el excelente ritmo que seguía antes de su lesión ante el Almería, a finales de la temporada pasada.

Los sevillistas se plantaron delante de su oponente con la quinta metida. Tal fue la salida en tromba de los locales que antes de que se cumpliese el minuto de partido, un despeje de Roberto a tiro de Cáceres era remachado por Manu del Moral. El jiennense se encuentra en plena racha después de romper su sequía ante el Sporting, habiendo marcado en todos los encuentros desde que firmase ese espectacular tanto. Sin duda un arranque espectacular con diez minutos que embotellaron a los de Fabri en su área, pero poco tardó el Sevilla en levantar el pie del acelerador. Poco a poco el ritmo de los nervionenses se fue disolviendo, aunque seguían cosechando buenas oportunidades para perforar la meta rival, como otro tiro del enrachado Manu, aunque sin mucho tino. El Granada empezó a rondar las inmediaciones de Javi Varas y éste se tuvo que aplicar para desviar una buena falta directa de Abel Gómez. Se iba perdiendo poco a poco el dominio del balón y los nazaríes se sentían menos asfixiados, pudiendo hilvanar alguna que otra jugada pero sin comprometer en exceso a los locales, dinámica con la que se llegaría al final del primer acto.

Los de Marcelino retornaron al césped con energías renovadas, volviendo a hacer a sus rivales que se replegasen sobre su portería. Para ello, el técnico quitó a un flojo Kanoute, el cual no tuvo su mejor noche, por Armenteros, ubicando a éste en la izquierda y a Trochowski en la mediapunta. Primero un remate de cabeza de Navas que se marchó desviado y luego una triple opción de Manu, Armenteros y el ex del Hamburgo que ninguno consiguió situar en las redes de Roberto. El meta sostenía a los suyos con paradas de mérito, captando la atención que en otros encuentros atraía Varas.

A su vez, los granadinos aprovechaban los descuidos de la zaga sevillisa, como un tiro de Uche, el cual remató fatal enviando el balón a las nubes para suerte de la parroquina nervionense. Ésto sería un mero aviso antes del gol del granadino. Una contra mal defendida por un tierno Spahic hacía que Ighalo, que acababa de entrar en el terreno de juego, disparase a la cruceta con la fortuna de que el rechace callese franco para Geijo, el cual empujaba el esférico de cabeza ante el salto felino de Varas, que no pudo hacer más que acariciar la bola.

Empate a uno y el Sevilla se veía envuelto en un correcalles de doble filo. Una clara ocasión fallada por el canterano Luis Alberto, revulsivo ante el cariz que tomó el encuentro, precedería al segundo y definitivo tanto visitante, que se vino arriba a medida que pasaban los minutos y encontraba en Franco Jara un puñal para los sevillistas. Los hombres de Fabri no dejaron escapar las pocas oportunidades de las que dispusieron, al contrario que sus rivales, y en el último suspiro del encuentro, Mikel Rico se sacaba un zapatazo muy preciso tras la dejada de cabeza de un Ighalo que fue el auténtico torbellino para la retaguardia local, dando la segunda victoria a los recién ascendidos.

Como dice el refrán "Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe", nada más exacto para explicar la situación del Sevilla. Tras sus coqueteos con el Racing, otro colista le pinta la cara, dejando al equipo sin su vitola de equipo imbatido y encima en casa. El equipo  ha pasado a ser una montaña rusa durante los partidos. Necesita un salto hacia adelante en el centro del campo, recuperando a jugadores vitales como Rakitic y Navas y más empaque a la hora de defender las contras, en las que hasta los colistas les sacan los colores.

Ficha Técnica


Arbitro: Mateu Lahoz. Amonestó al local Medel y al visitante Siqueira.


Formaciones

Sevilla: Varas; Cáceres, Escudé, Spahic, Fernando Navarro; Jesús Navas, Medel, Rakitic,  Trochowski (Luis Alberto, m. 82); Kanouté (Armenteros, m. 45) y Manu del Moral.

Granada: Roberto; Nyom, Fran Rico, Mainz, Siqueira; Íñigo López, Abel Gómez (Moisés, m. 90), Mikel Rico, Mollo (Jara, m. 61); Uche (Ighalo, m. 77) y Geijo.

Goles


1-0, min. 1: Manu del Moral. 1-1, min. 78: Geijo. 1-2, min. 89: MikelRico.

Incidencias


Estadio Ramón Sánchez-Pizjuan.


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